jueves, 11 de junio de 2020

El presentismo como miopía de la conciencia histórica

Esqueleto del altar de Zeus (circa 1,100 a.EC.)

alFredoTriFf

El presentismo es una miopía de la conciencia histórica. 
Vivimos el presente, el AHORA. 
No hay ni redención ni historia en el AHORA instantáneo. 
Vivir sólo se puede en cada presente. 
Imaginarse puede el pasado y también lo venidero. 
Vivimos AL PASO. 
El tiempo PASA, y también la ciruela pasa. 
La conciencia es más dura, pero pica y se extiende.
No se viaja en el tiempo al pasado como quien viaja en el espacio. 
Se viaja a en la empatía con el tiempo. Comprensión íntima de lo que FUE. 
No solo imaginar lo que fue, sino lo que fue A SU TIEMPO.  
Basta que la conciencia se emplace en un punto del espacio. 
Desde ese punto se perciben otros puntos allá y acullá. 
Vayamos despacio, no vaya a ser que perdamos el sabor de la parada a que llegamos. 
Por ejemplo, cuando se era más joven. 
No estoy YO en el pasado que ya NO ES. 
Lo que sí está es mi conciencia. 
Comprender quién fue uno es conocer el por qué uno fue.  
Hacer historia es penetrar la conciencia del pasado. 
El presentista no alcanza a ver que cada instante del FUE tiene su razón. 
El FUE jamás hubiera podido ser de otro modo. 
¿No somos causa y efecto exacto de ese FUE? 
¿No es cada instante del FUE una película en marcha atrás desde el AHORA?
En mi viaje al FUE mi AHORA se torna futuro en mi conciencia. 
Voy a un AHORA ignoto. 
Un AHORA solo mío que nadie nunca ha visto. 
La conciencia del tiempo tiene ventajas y desventajas. 
La ventaja es sentirse simultánea con el FUE; la desventaja es que el FUE ya NO ES. 
Sin embargo, queda algo en el FUE que le da vida. Ese algo es LA HUELLA. En ella mora la verdad. De ahí el oráculo del anciano Anaximander. 
La verdad siempre fue traza, hueso en el fango, viso en la roca, hedor.
Primero, la extrañeza de arribar. 
No estamos en el AHORA del FUE. 
Noooo, nunca llegaremos a ese nudo gordiano. 
Estamos en nuestro AHORA imaginando otro AHORA desde la conciencia.
Veo a mi madre joven, en Alto Cedro, antes de llegar a La Habana y conocer a mi padre; acabo de llegar a las trincheras de Verdún donde perderé mis piernas; soy un rico patricio esclavista en la Roma antigua; acompaño a mi maestro Sócrates en su lecho de muerte; soy un Sapiens herido de muerte por un animal salvaje, contemplando el fuego lejano de la hoguera.
No hay tiempo vivible en este mundo para vivir cada episodio del FUE. 
Es, en el mejor de los casos, un útil ejercicio vicario. 
Sacudo mi ensimismamiento y vuelvo a mi AHORA (mi hija me llama por teléfono).
Todo esto le es ajeno a la miopía presentista que rehusa ver más allá de la punta de sus narices. Su blanduzco dios de barro, su estático y sordo AHORA. 

6 comentarios:

Yanitzia Canetti dijo...

AHORA mismo, me encanta esto, paisano. Y dentro de un tiempo, me encantará lo que me encantó.

Alfredo Triff dijo...

Gracias, Yanitzia, y honrado. ¡Tu fama paisana te precede!

Juan C. Mirabal dijo...

Coincido con Yani, eres ingenioso, profundo, elocuente, me agrada leerte, saludos

Alfredo Triff dijo...

Gracias, Juan C., es un honor que me leas.

Il Pensatore dijo...

Excelente artículo, excelente evidencia: “El presentismo es una miopía de la conciencia histórica” Hablando de nuestro eterno presente; deshumanizante pecado es negar y no aprender del pasado, o dejar de proyectar el futuro. Fascinantes e interminable los temas de este este artículo. Tiempo, Consciencia, Percepción, Empatía. Deliciosa especulación del allá y del acullá en el artículo… Cierto, sin historia, no conciencia, ¡no AHORA! Sin eternalismo, por usar el adjetivo con licencia, no hay presentismo y viceversa, para aquellos que quieren eliminar o modificar el pasado, para destruir el presente y manipular el futuro. !!!! Yo diría poesía filosófica: “En mi viaje al FUE mi AHORA se torna futuro en mi conciencia. Voy a un AHORA ignoto. Un AHORA que nadie nunca ha visto. La conciencia del tiempo tiene ventajas y desventajas. La ventaja es sentirse simultánea con el FUE; la desventaja es que el FUE ya NO ES”. Bravo, profesor Triff 😊

Alfredo Triff dijo...

Gracias,Pensatore.