domingo, 3 de marzo de 2019
Gino Paoli - Senza Fine
Hablando de cine, anoche (unas horas antes) mi mujer y yo hemos visto Mi Vida sin Mí, una de las obras tempranas (2003) de la realizadora Isabel Coixet, la cual se convirtió en su primer éxito en el séptimo arte. Coixet es la autora de la antológica Verano 1993, la cual citamos en la relación de películas relevantes de 2018. En esta otra cinta una joven chica casada, madre de dos hijas, es diagnosticada de una enfermedad mortal que le deja muy poco tiempo para vivir. A partir de ese momento se genera un redescubrimiento del sentido de su vida y comienza a preparar estoicamente su partida sin darle a conocer a la familia la fase terminal de su existencia. El guion de Coixet es una adaptación libre del relato corto Pretending the bed is a raft (Simulando que la cama es una balsa) (1997), último texto en un compendio con idéntico título de la escritora floridana Nanci Kincaid. El script de Coixet se convierte en una pieza literaria envidiable para cualquier escritor. Y la concepción del filme muestra por primera vez que los ovarios de esta mujer-cine están hechos de célula viva, talento y exquisita sensibilidad. Su delicadeza como autora echa mano a una banda sonora urdida por el barcelonés Alfonso Villalonga, uno de los más reconocidos compositores musicales del cine europeo. Entre las citas ambientales que no son de Villalonga, la Coixet escoge esta hermosa balada de Gino Paoli, un icono de la canzone italiana. El filme debe estar disponible en Netflix y si se aventuran a verla disfrutarán de un filme memorable, pletórico de ternura e impecable belleza. (JR)
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1 comentario:
GRACIAS, HAY QUE VERLA.
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