lunes, 8 de julio de 2013

la conciencia y el charco de sangre


Delusion Dwellers, Laurie Lipton

Rosie Inguanzo

Una transgénero a quien dos policías la noche anterior golpearon y violaron dentro del carro de patrulla, con moretones visibles en los brazos y la boca rota, ridícula y lastimada dentro de la minifalda brillosa, ondea la bandera multicolor del CENESEX coreando: “Cuba por el respeto a la diversidad sexual”.

Un mulato que se llama Yuman vende broches del Che en la feria de artesanías de La Habana Vieja.

Una de las hijas de X (ex fiscal general de La República de Cuba, aka Charco de sangre) y amiga de la adolescencia (lo que me causa problemas al escribir esto), exiliada en Miami —donde vive con sus hermanos desde hace algunos años— dice que su progenitor, a quien visitó antes de morir de viejo el año pasado, “fue el mejor padre del mundo”.

Un ciego limosnero, entonando un bolero en una esquina mugrienta de la calle Neptuno, se interrumpe bruscamente cuando escucha caer una moneda en la lata: “Que nos quiten el bloqueo y nos devuelvan a los cinco espías” —dice a modo de dar las gracias.

Una ex azafata de Cubana de Aviación, que ahora trabaja en una de las compañías de charters que vuelan desde Miami rumbo a La Habana dos veces al día, acaba de comprar un edificio de apartamentos en Hialeah con el dinero que su suegra, alto miembro del Partido y militante comunista, le trajo personalmente para estos menesteres.

Una ex militar de las Fuerzas Armadas, ex agente del Ministerio del Interior, quien dice que acaba de entregar su carnet del Partido y que el año pasado resignó de todas sus responsabilidades para dedicarse al negocio cuentapropista, me alquila un apartamento en el Vedado.

Todos hablan con naturalidad. Pero no llevan una existencia normal. Hay un deslinde en sus conciencias. No pueden decir lo que piensan, la verdad pudiera llevarlos al atropello o la cárcel, no entienden la obligación moral de la libertad.

11 comentarios:

  1. Esa no existencia normal, ese no poder o no querer decir, esas incongruencias somos nosotros. Esa es la peor ruina. Explícito post.
    Cristina

    ResponderEliminar
  2. el problema es que nunca lo entendieron, eso que describes con brochecito de oropel para cerrar, rubia... la obligación moral de la libertad. y tan queda explícito el pqué en cómo los describes: todos ex creyentes (de-mentes, de-culos, de-títeres, de-acomodados, des-carados) de la Gran Mentira, la coagulación perfecta y putrefacta del charco de sangre de la República.

    y nosotros, en la lejanía, los ex huídos, nos amargamos la culpabilidad del escape pensando que de ahí tambíen salimos, de esa semilla corrupta, y que tal vez hubiéramos sido lo mismo según las circunstancias y sus gira-gira. y nos miramos en el espejo con mejores afeites y maquillajes, a nuestro alrededor los mullidos colchones y los asientos de cueromantequilla de los pupúes de lujo y creemos que no, que no y luego de pronto, explota un siquitraque de mierda fina (una mentirita, un fraudecito, una manipulacioncita, un aserismo abismal, un noticiero lleno de opiniones) en Mayambana y boom-fuácata... nos embarra de pies a cabeza y sí, sí... sabemos que somos lo mismo.

    ahí está el detalle de la conciencia, que es la luz al final del largo y oscuro túnel que es la obligación moral de la libertad --lucharla, merecerla, defenderla-- que casi ya no nos existe, o peor, no existimos para ella. nuestro túnel de esa obligación está cubierto de espejos carcomidos por las humedades de tantas mentiras oxidadas, y entre capa y capa está lleno de moscas asfixiadas, muertas en las esquinas oxidadas de cada panel reflexivo.

    y si queremos ser optimistas, nosotros los ex idealistas... tres generaciones más y tal vez... pero ya para entonces seremos la nueva Atlántida, el punto de turismo submarino de moda en el ex universo, donde las sirenas tendrán el más delicioso culo que bocas ex humanas jamás hayan probado.

    yeah, omu, go take a fking chill pill. i know. saludos, rubia linda.

    ResponderEliminar
  3. no se rompan la cabeza... es la mescolanza del hombre nuevo con el viejo y con el del futuro; con el hombre que quiso ser y no pudo, y del que no llegó o se pasó.

    imagínense a los que sobrevivieron los campos de concentración nazis justo en el momento en que les abrieron las puertas a la libertad, y después tuvieron que verse las caras, los que colaboraron y los que no lo hicieron. víctimas todos, aunque victimarios también los primeros.

    Saludos.

    ResponderEliminar
  4. Ah,"no entienden la obligacion moral de la libertad"? Rosi querida y generosa: la libertad no es una obligacion moral.Es un pajaro azul escurridizo y temeroso en donde el dios miedo hace de las suyas asustando a los mortales que muchas veces no saben que hacer con ella y optan por vivir encarcelados en la prision de la inconciencia. Besits,AT

    ResponderEliminar
  5. Ahora que estoy muy lejos, veo claro ese montón de mierda que obsesiona tanto a los que se "escaparon". Triste isla, pobre montón de mierda pestilente.

    ResponderEliminar
  6. Instantáneas de los escombros. A esos hemos quedado reducidos. A montones de miserias esparcidas por ciudades mugrientas, por puebluchos soporíferos y desvaídos, en las profundidades de los líquidos devoradores que nos rodean o -siguiendo la descarga de sonora- entre los aires refrigerados del primer mundo.

    Las estampas de Rosie insinúan por qué descendimos tanto... "La piel, nuestra piel, esta maldita piel" escribía Malaparte. Y seguía..."Usted no puede imaginarse de qué es capaz un hombre, de qué heroicidades y de qué infamias es capaz con tal de salvar la piel". Y remataba..."Ésta, esta piel asquerosa"...

    ResponderEliminar
  7. Amigos, ayer alguien me preguntó si era cierto lo de alguna de estas(y otras)viñetas, y le respondí que la realidad a veces no es sostenible en el papel. ¿Qué nos soprende? (la primera vineta nos la refirió Wendy Iriepa en el conversatorio del otro día)
    Parece bluff, pero ando a la caza de estas desproporciones de la realidad (y de mi biografía).

    jajaja! los comentarios de sonora son siempre un banquete:"...donde las sirenas tendrán el más delicioso culo que bocas ex humanas jamás hayan probado".

    ResponderEliminar
  8. ay, rubia... beggar´s banquet lo mío, arrebatos de saber que no voy a ver la luz al final del túnel... ay qué susto me he dado al abrir el tmb hoy, yo que soy/estoy cegata de remate... y mis pobres córneas están quemaditas de tanta pantallita... y veo el nombre de Olga M... T... gUlloa y pienso... coño, esa no soy yo! y voy y me concentro en las T y digo, vaya, vaya es la hija de la Olga de Cuba... así que bájate de esa nube que tú sólo eres la Olga de Matanzas... dale, pues, bolereando nos sanaremos todas las heridas de la mala conciencia.

    ResponderEliminar
  9. http://www.miaminewtimes.com/2013-07-11/news/cuban-organized-crime-miami/

    somosLOmáximo

    ResponderEliminar
  10. ...pero los cubanos de aqui de donde salen si no de alla?; es decir, que esos son estos, cruzar el espejo cambia la perspectiva pero no la naturaleza. Alla son asi, aqui fingen no serlo pero la verdad es mas fuerte que el fingimiento.

    ResponderEliminar
  11. el post habla de los allA y de los de aca...la misma cosa.

    ResponderEliminar