Iván de la Nuez en El País, comentando La conga irreversible de Los Carpinteros para la Bienal de la Habana, 2012:
Es difícil no entrever, en La conga irreversible, un resumen del devenir (y el presente) de un país a menudo explicado –y extasiado- por su excepcionalidad. Y es que, como si de caminar por la luna se tratara, los cubanos han marchado a contrapié al menos en los grandes hitos de su historia; con la agonía de los sueños y lastres propios de ese andar, digámoslo así, fuera de la gravitación “normal” de los acontecimientos. (¿No era, precisamente, la falta de gravedad una característica cubana que irritaba a Jorge Mañach en su Indagación del choteo?).De la Nuez concluye con el encabezamiento del post (arriba), dramática conclusión que se merece una segunda parte. La esperamos.