Amílcar Barca
Los periódicos de EE. UU hablaron de la spanishrevolution en sus comienzos desde un punto derivativo de las revoluciones espontáneas alojadas en el norte de África -Túnez, la plaza Tahir de El Cairo, Libia, Bahréin, Yemen, Siria. En estos momentos un batallón de jóvenes -estudiantes y parados mayoritariamente- pero también compuesto por adultos sin empleo, propietarios desahuciados por la crisis, grupos en contra de la injusticia provocada por la corrupción política de los partidos, grupos de denuncia de lo que representan los recortes económicos en educación y sanidad, grupos influidos quizás por el documental Inside Job en busca de los responsables financieros ubicados en Wall Street o en los propios bancos y cajas de ahorro españolas o por Stephane Hessel y su publicación Indignaos.
Grupos de inmigrantes que imploran el derecho de igualdad y trato con los residentes que se sienten marginados y utilizados cuando ya no son necesarios. Grupos que reclaman el derecho de autodeterminación. Desencantados que solicitan un cambio en la ley electoral o en la manera de operar y acceder a la política. O simplemente una asociación importante de telespectadores que piden que haya “más lectura y menos telebasura” en los medios de comunicación. Y, seamos claros, grupos de vagabundos jóvenes– lo digo con el máximo respeto y tristeza- o antisistema que sí, habrá que reconocer, que en una minoría muy exigua están entre el movimiento. Todo este conglomerado, entre otras propuestas ligadas al movimiento libertario o ecologista y otras que se pueden considerar entre la payasada y el oportunismo –hubo una joven pornostar que se solidarizaba con el movimiento para dignificar su profesión- forman lo que se ha llamado en consensuar: el movimiento de los indignados.
¿Qué les une?: la no violencia… que no quiere decir el silencio o el pacifismo pasivo. Les une las dos manos arriba en las manifestaciones en la calle, el cartón o el papel reciclado para escribir frases como “No hay pan para tanto chorizo”, “No os hemos votado pero os miramos con lupa”, referente a la falta de eficacia de los políticos. Una mirada entre el sarcasmo que indica que no les van a engañar otra vez, y otra que muestra la desesperación para que sus peticiones se resuelvan ya. Les une la democracia directa que respeta a la minoría perdedora, y una manera nada burocrática y clara a la hora de abordar los conflictos en asambleas. Los unen las redes sociales y los artilugios que el software crea en la red a la hora de comunicarse y tomar decisiones. Los juntan las ganas que este capitalismo se reforme a fondo.
Algunos, vamos a ser sinceros, quieren que desaparezca este concepto. Los re-úne la plaza del pueblo o la ciudad; la originalidad a la hora de abordar propuestas, el sueño siempre defendible y legítimo de hacer una sociedad mejor y justa; la solidaridad con el pueblo griego que ya sufre en carne viva las consecuencias. Y una dosis de paciencia y utopía que ha recibido el soporte, directa o indirectamente, de casi el 70 % de la población española. No sin reconocer las contradicciones y peligros que este movimiento exhala por su falta de concreción y pocos acuerdos, incluso por algunos conatos de violencia y hostigamiento directo a personas, hoy representa la antesala de los cambios fatídicos que se avecinan en un futuro no muy lejano en Europa.
América tiene que estar atenta a estos sucesos ya sea para aprender del viejo continente o para evitar que se repitan los hechos que la historia nos recuerda antes de la II Guerra mundial…Y no lo digo yo, sino varios expertos historiadores y sociólogos que pueblan este planeta. Yo, americano de adopción y catalán de nacimiento. Me sumo y me indigno tal como está hoy el mundo y le recuerdo, a Barack Obama, por poner un ejemplo concreto, la promesa que hizo en su postulado a presidente con respecto a los responsables que ocasionaron la debacle en el mundo financiero de Wall Street. Aunque no lo crean esta es probablemente la fuente “original” de todos estos conflictos arriba citados y si no que se lo pregunten a Islandia.
10 comentarios:
Magnífico reportaje! Para aquellos interesados en este movimiento, aquí encontrarán información abundante: http://spanishrevolutionresources.blogspot.com/
Te felicito Amílcar por este artículo. Es difícil visualizar el efecto a largo plazo de este tipo de movimientos, es decir, si es que realmente se galvaniza en cambios positivos. Pero es un comienzo. Lo triste sería que por castigar al PSOE, el pueblo vote al PP y las cosas sigan igual, o peor, cuando quizás una mayoría de boletas anuladas debiese ser el mensaje de mandato para iniciar reformas verdaderas.
Inside Job le ha abierto los ojos a muchos, que el danzón de los millones lo bailan tanto los repu como los demo, y de la desafortunada participación de prestigiosas instituciones universitarias y académicos en la estafa.
Saludos,
MI
La culpa siempre la tiene el totí. Este es un viejo dicho muy cubano amigo Amilcar pero lo cierto es que ya America (USA) ha tenido sus movimientos 15 M en varias épocas de su evolución y muchos de esos jóvenes "lo que se ha llamado en consensuar: el movimiento de los indignados" son hoy CEO de bancos y compañías ultracapitalistas. Otros, es cierto aun placen en sus "islas" de privilegios alcanzados y en sus sembrados de canabis. Gracias a esos movimientos 15 M de "America" hoy Obama dicta en la casa más blanca. Que pasó en esa España y en esa Europa tan altruista y socialmente correcta que después de, no digamos estos 200 y pico de años de
dudosa democracia americana, sino siglos de uso del negro en sus fluctuantes economías, que aún no habla un negro, un moro o un arabe, por los demás, como aquí en America.
Respetuosamente como siempre, LS.
Felicidades, Almicar, en esa diversidad y esa energía está el futuro, incluida la estrella porn.
Hay que acabar con la bi-democracia esta que solo apoya a los usureros de los bancos y a los especuladores que no pueden crear nada tangible para los demás, a no ser desgracias.
Ernesto
Sofisticación de la ilusión de democracia, Luisito. Los descendientes de aquellos ingleses de fluctuante economía que plantaron por estas tierras debieron sentir que liberaban otra vez al Negro votando por el negro, ello en el más piadoso e ingenuo de los casos. Por otra parte, la mejor manera de convencer (y controlar) a una clase baja que se expande des-controlada-mente es hacerle creer que son ellos los que gobiernan (Maquiavello). Eso, ilusión, prestidigitación de valores (y miedos) e intereses...
En cuanto a España corresponde aquello de la "nobleza obliga"... a olvidar-digo-sólo aquello que la sostiene como ideal, inservible lastre dorado en los corazones. 800 años de dominación mora hacen inevtable el recelo a nivel atávico: Un país que paga para conservar realeza no puede asumir la realidad de ser gobernado por moros, negros y la gana seria toda. Allá envidian Hollywood, acá envidian las coronas. Gobiernan en todas partes, más o menos a la cara, los dueños de una banca donde se sientan a verse las caras de horror screto IndolenCIA y desilusión.
Sangre Púrpura
Bien gracias amigos y es un honor que el "profe" se integre en este comentario. No hay día que los prinicpales periódicos no hablen de este movimiento tanto partidarios como detractores. La decisión parlamentaria de Grecia de esta semana indicará por donde van los tiros, no sólo en el Estado Español sino en Europa. La cosa esta seria amigos aquí en Europa. Hay que reconocer que la crisis have shaken the black waters of politics around the world.
Un abrazo desde Barcelona
Amílcar Barca
"Sofisticación de la democracia" con la CIA y los banqueros gobernando el mundo, me gusta eso sangre pero como tu post, demasiado poético. ¡Y fíjate hasta me gusta! pero al pan, pan...el negro está ahí y tan cierto como que el símbolo sexual de mis hijas no es Beckham sino Dwyane Tyrone Wade.
LS
Amílcar: Muy buen post. Creo que además de la no violencia, les une un propósito transnacional que irónicamente une a ese difícil y contradictorio organismo que llamamos pueblo español (aunque tú tengas tus reservas).
Buen post, Amilcar. No sabemos si estamos ante la respuesta aún desconcertada a los efectos de ese fenómeno que se nos encima y que Steve Keen denomina "capitalismo zombie". Hacia dónde derivará esta situación es una incógnita. ¿Estamos ante una crisis cíclica de onda larga? ¿O estamos justo en un punto de giro de las estructuras? ¿Hay una tendencia a no salirse del modelo debido al trauma legado por los totalitarismos de izquierda o esto no es más que el preludio de una revolución profunda y de nuevo tipo? Lo cierto es que estamos en un límite de declinación y lo normal es que si no somos visionarios o los gestores históricos de lo nuevo no distingamos la cresta del después. Salud, amigo, unas gratas vacaciones y un choque de copas.
Gracias AB por la magnífica perpectiva de primera mano. Parece que la cosa arde. RI
Publicar un comentario