atRiFf
A partir de la pateadura que resultó en la muerte de Juan Wilfredo Soto, miembros de la disidencia han señalado con preocupación este penúltimo párrafo del informe de Raúl Castro en el VI Congreso del PCC.
(...) es necesario aclarar que lo que nunca haremos es negarle al pueblo el derecho a defender a su Revolución, puesto que la defensa de la independencia, de las conquistas del socialismo y de nuestras plazas y calles, seguirá siendo el primer deber de todos los patriotas cubanos.¿Qué es una plaza? ¿Qué es una calle? Son espacios públicos. En cualquier estado -incluyendo por qué no, al socialista- debiera permitirse el derecho pacífico de la libre expresión popular, sea a favor o en contra del gobierno. Eso hoy en día es sencillamente un derecho político inalienable por el que pueblos enteros están siendo masacrados a través del medio oriente. Estar en desacuerdo con ese derecho es ir contra la marcha de la historia.
Mirémoslo desde el ángulo del gobierno. Como dirigente máximo del PCC, Raúl Castro está en la obligación de permitir la libre expresión popular en las calles y las plazas cubanas. Es de esperar que no todo el pueblo tiene -ni puede- estar de acuerdo con una sucesión familiar ininterrumpida por más de 50 años. El hecho de expresarlo no pone en peligro conquista alguna. Si la Revolución es apoyada por la mayoría del pueblo no hay por qué temerle a la protesta pacífica de un grupo de damas vestidas de blanco, u otros "grupúsculos". La represión contra la disidencia lejos de "preservar las conquistas del socialismo" hace lo opuesto: Pisotea el respeto político que todo gobierno le debe al gobernado.
¿Cómo puede el gobierno cubano llenarse la boca y criticar la represión en el mundo capitalista y no respetar el derecho de su propia población a expresarse pacíficamente? La justificación no puede ser ya más que tal acción es un peligro para las conquistas del socialismo, lo que la hace ilegal. Es ilegal porque viola las leyes revolucionarias. Viola las leyes revolucionarias porque es un peligro para las conquistas del socialismo. Tal falacia fuera risible, sino implicara tanta humillación. Cabe preguntarse cuál es la causa real del miedo. Si salir a la calle fuese un peligro para las "conquistas del socialismo" lo sería precisamente porque se le niega al pueblo su derecho a tener derecho. Pero entonces no hay tal "conquista". Si la hubiese, sería una conquista aberrante, injusta.
Respeto implica simetría entre gobierno y gobernado. Como expresión de la voluntad popular, todo gobierno se debe a los gobernados, no lo contrario. Expresarse pacíficamente es un derecho del gobernado. Exigirlo es un deber. Permitirlo es saber gobernar. La razón está del lado de la disidencia que pide un espacio de expresión pacífico. Negárselo es injusto y arbitrario.
¡La calle es un derecho de todos!
Oyes Triff trata de meterle esa logica a esa gente. Ni con compota.
ResponderEliminarA mi me parece bien poner los puntos sobre las ies.
ResponderEliminarAno: la idea es otra.
ResponderEliminarDe acuerdo, de acuerdo... pero mientras tanto los palos van y vienen, y de alguna forma nos golpean a tod@s. Qué podemos hacer no qué podamos decir, debería ser la cuestión. Es importante poder expresarse en libertad pero más importante es poder vivir esa libertad. Ya me da hasta vergüenza quejarme de la represión en Cuba, sólo puedo solidarizarme y seguir...
ResponderEliminarTriff es importante seguir denunciando los abusos del regimen cubano. Curioso el silencio de tantos que saltaron a voz en cuello cuando la muerte de Zapata. Unos muertos son mas interesantes que otros??????????????????
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminarDe acuerdo con el segundo comentario de @anonymous
ResponderEliminarTienes razon @cortazariana.
ResponderEliminar