Claudia Cadelo en Diario de Cuba. En un párrafo, resumida la realidad de una generación:
Pienso que eso que llamamos apatía no es más que una de las muchas máscaras del miedo. Los jóvenes, y me incluyo, tenemos dificultades para vislumbrar el futuro de un país diferente, democrático, sin "líderes históricos". Nacimos después de 1959, vimos la desintegración de la Unión Soviética y la caída del muro de Berlín, el fin de la guerra fría y el derrumbe del comunismo. Mientras el mundo cambiaba, sin embargo, en la televisión cubana siguió hablando Fidel Castro. Sabemos que no somos el hombre nuevo que nuestros padres soñaron ni Cuba la tierra que nos prometieron. Entre el miedo a los aparatos represivos, la impotencia ante el muro del totalitarismo y el deseo de cumplir los sueños personales, emigrar se convierte en una de las mejores opciones.