Foto: Claudio Fuentes Madan
"Sin embargo, hay otro tipo de eventos rebeldes a caer en el saco, tampoco los entiendo –incluso los entiendo menos–, pero no puedo dejar una y otra vez de volver a ellos, de analizarlos, desmembrarlos. Me obsesionan, me quitan el sueño. Siento que no deberían ser, más bien que NO pueden ser. Mi racionalidad me dicta que son imposibles, mi cerebro me grita desesperado que no existen personas que se presten para golpear e impedirle a una madre ir al cementerio a ponerle flores o rendirle homenaje a su hijo muerto."