viernes, 19 de junio de 2009
Los peores amantes del mundo
Grettel J. Singer
—Tú no me digas que los cubanos son los peores amantes del mundo. Es que no te lo puedo creer.
—Te lo juro por Dios, por mi abuelita –que en paz descanse- y por mis hijos, son pésimos en la cama.
—¿Tú estás segura? Mira que tienen una fama de ser muy dotados, muy talentosos. Oye, esas españolas, esas mexicanas, todas se vuelven loquitas por un macho cubano que las trajine un poco.
—Quimeras y más quimeras. Mírame a los labios, A-R-T-I-F-I-C-I-A-L.
—¿Quiénes, el cubano o su aparato?
—Ambos son pura pantalla, coquito tostadito. Bla, bla, bla, bla, bla, bla, bla, y luego te tiran de un lado para otro con tremenda tosquedad, te dan un halón de pelo y te gritan cuatro vulgaridades que los haga sentir todo lo papalongo que jamás llegarán a ser. Y punto. Punto final.
—No te lo creo, qué va, no te lo creo. Excepto esa parte que dices que nos tiran de un lado a otro y nos dicen una de cosas feas.
—Así es querida, así es. Lo único que les interesa es sentirse bien sin reflexionar por un segundo en cómo nos sentimos nosotras. Tienen un único objetivo en esta vida y es lograr un orgasmos ancho y pleno, ¿y tú crees que les importa encontrarnos allí donde han llegado ellos? Nada de eso, fíjate si están equivocados que los cubanos se piensan que nuestros orgasmos se originan a través de los suyos. ¿Me explico?
—No, de veras que no.
—¿Qué es lo que no entiendes? Los cubanos son además de insípidos, ingenuos y se han creído esa fama de buenos amantes que se le ha dado en Hollywood. La pasión y un bigote lleno de cucarachas no es lo único que conduce a un buen clímax, ¿tú sabías eso?
—No, no, no lo sabía. Bueno, es que yo me acabo de enterar que en realidad nunca he tenido un orgasmo. Mira que llevo años confundida, pero el otro día vi un programa en la televisión donde describían el orgasmo en la mujer y la verdad es que en nada se asemeja a lo que yo imaginaba. La doctora explicó el proceso, y te digo una cosa, entendí bien lo que decía muy al principio de sus explicaciones, pero ya cuando comenzó a hablar de espasmos y convulsiones, de sensaciones afiebradas, me quedé perdida en el llano.
—Ves lo que te digo. Tú te crees que es invento mío, pero no, todo eso lo leí en la revista National Geographic. Ahí salió detalladito, con estadísticas y encuestas. Información prestigiosa e infalible, nacional.
—¿Y esa revista no es de exploraciones y mapas y cosas así?
—¿Es que acaso el hombre no es todo eso y más? ¿Tú sabes por qué no logras espasmos y convulsiones?
—Sí, creo que sí. Según la doctora de la tele tengo un problema de resequedad.
—¡Qué problema de resequedad ni qué ocho cuarto! Eso no existe, lo que te pasa es que tú nada más has estado con cubanos. Salte de ese equipo y ya verás cómo lubricas y requetelubricas.
—¿Tú crees? ¿Y qué hago con mi marido?
—Deja a ese inurbano de una buena vez que ni siquiera te ha gustado nunca. ¿Para qué quieres un marido que no sabe complacerte y además te pega los cuernos? Son muchos años de aguante, demasiados. Tu eras una mujer bastante bonita y te conservas estupendamente, ya verás como aparece alguien mejor.
—¿Te imaginas? A ver, déjame que lo asimile un poco…
—Estoy segura. Atiende a lo que te voy a decir. Un amante cubano es más bulla que otra cosa, y además tienes que tragártelo completico, con sus complejos de Adonis, con ese machismo que no es otra cosa que la falta de una buena cama bien dada. Ahora, una cubana, ya eso es otra cosa, nosotras sí sabemos lo que queremos dar y recibir. ¿A que sí?
Pasaron unos meses hasta que la mujer que nunca había logrado un orgasmo se decidió a abandonar a su marido y se cambió de equipo, y por fin consiguió infinitos espasmos y convulsiones. Y su amiga, bueno su ex amiga, por fin se pudo casar con el hombre con el que había mantenido un concubinato por más de veinte años, un hombre cubano, dotado, excesivamente talentoso y con un bigote lleno de cucarachas.
Jajaja. Me encanta el final.
ResponderEliminarRaysa
Gretel tu dices eso porque no me has probado a mi. Luego te voy a decir por que somos los mejores, te voy a dar las razones. Muneca, tienes que probarlo y despues voy a quedar a tu disposicion.
ResponderEliminarTípico final tonto desde el inicio ya me lo imaginaba
ResponderEliminarAT , te noto un poco parcializado en lo de Iran, estas viendo mucho Fox...es evidente la mano de la CIA en todo eso.
ResponderEliminarOye Gretel nos llevaste recio.
ResponderEliminarGood one! Gretel, espero que te encuentres bien.
ResponderEliminarAunque casi nunca dejo un comentario, siempre disfruto de tu talento.
De acuerdo con el 911, sufre de predecible.
ResponderEliminar… hasta que la mujer que nunca había logrado un orgasmo se decidió a abandonar a su marido ¿?y se cambió de equipo¿?, y por fin consiguió infinitos espasmos y convulsiones….
ResponderEliminaray, gjs, que las cosas por su nombre saben a pan de gloria recién horneado... ahí va, mi sugerencia para otro final, para el próximo atrevimiento tuyo no tan diplomático con los mayambaneros, para que sea más risqué y se arme buen revuelo de vulgaridades entre los comentaristas:
Pasaron unos meses hasta que la mujer que nunca había logrado un orgasmo se decidió a abandonar a su marido y por fin consiguió infinitos espasmos y convulsiones… con su amiga.
Grettel, Estas Acabando con la Quinta y con los Mangos! Carinos, Manny
ResponderEliminarEnemigorumor estás viendo mucho la mesa redonda (via web), empiezas a sonar un poco como Randy Alonso...
ResponderEliminarNo sé qué pensar, Grettel, puesto que eres una autora supuestamente defensora del "feminismo". Este cuentico muestra ese lado tan "perverso de las mujeres" que tanto atacan las feministas que se consideran de la vieja escuela: engañarse unas a otras y mutilarse, ego y autoestima, por un hombre.
ResponderEliminarPor otro lado, se podría ver con ironía, duda diríamos provocada por lo del "bigote lleno de cucarachas", así que vamos a tender ese puente, a ver qué dices.
Muy bien por Grettel. Pues a mí me parece que la posibilidad de cambiarse uno de equipo no debe ser el problema. Ya somos adultos y vivimos en un clima de tolerancia, ¿no?
ResponderEliminarSra. Feminista, precisamente lo que le sugiero a la autora en mi comentario, que ud. pareciera, malinterpretó, es que lo diga sin eufemismos... que la mujer se cansó del marido y se metió a lesbiana, o cualquier otra palabreja que la autora, siendo fina, quiera escoger... se metió a sáfica, a horneadora de crepes o panes de gloria... y ya.
ResponderEliminarmire qué gracia, eufemismo rima con feminismo y otros y tantos ismos... qué cómico
Lo del bigote tiene su misterio, Gretel, al igual que la barba. Tras una larga e intensa sesión de buceo es ahí donde mejor se aloja el olor a mariscada y la marea espesa de salitre y algas. El vestigio se hace duradero, proustiano, exacerbando apetitos de reincidencias y muecas de deleite. Un buen mostacho, luego de haberse descarpado en los cálidos abismos de un monte de Venus, funciona semejante a un roast chef. Le lega a los sentidos los aromas del asado.
ResponderEliminarsonora, le estarás cambiando el final al cuento? creo que es irrelevante que la mujer terminara siendo lesbiana. la historia se trata de cuán lejos puede llegar una mujer obsesionada para conseguir al hombre de su vida.
ResponderEliminarano de la 1:38, no te equivocas, hay mujeres muy perversas como esta doña que le tumba el marido a su amiga, pero también la ayuda a liberarse de una situación que no le favorecía. a veces la gente con su malicia termina iluminándote...
gracias a todos por leer y comentar.
un beso
Cómo preparar Tortilla española
ResponderEliminarPelamos lavamos y cortamos las patatas en cuadritos pequeños y las salamos. Pelamos y cortamos en juliana la cebolla.
Ponemos al fuego una sartén honda con abundante aceite de oliva y cuando esté caliente, echamos las patatas y la cebolla.
Mantenemos el fuego no muy fuerte, para que las patatas y la cebolla se cuezan en el aceite. Cuando estén bien blandas y ligeramente doradas, las sacamos de la sartén y escurrimos el aceite.
En un bol batimos los huevos hasta conseguir una buena mezcla. Echamos entonces las patatas y la cebolla sobre los huevos batidos y removemos bien para que quede todo mezclado y rectificamos de sal.
Poner al fuego una sartén honda antiadherente, echamos dos cucharadas de aceite de oliva y cuando esté caliente, movemos la sartén para que quede bien aceitado el fondo. Entonces echamos la mezcla de huevos, patatas y cebolla y la extendemos bien. Bajamos el fuego y movemos la sartén con movimientos circulares para que la tortilla se mueva dentro y no se pegue. Dejamos cocer hasta que se vea que empieza a hervir la mezcla.
Damos la vuelta a la tortilla poniendo un plato llano encima de la sartén, a modo de tapadera, y girando la sartén sobre el plato. Ahora echaremos de nuevo la tortilla, dejándola resbalar cuidadosamente, desde el plato a la sartén.
Movemos de nuevo con movimientos circulares la sartén y la dejamos cocer entre 2 y 3 minutos, dependiendo del gusto de los comensales. Apartamos y servimos en una fuente. Podemos servirla fría o caliente
sospechamos que la inspiración vino de comentarios acá:
ResponderEliminarhttp://cubainglesa.blogspot.com/2009/06/cuba-sexo-e-identidad.html
Gretel, Pena que no habra conocido la dama un buen pene.
ResponderEliminarL. Machisimo Maximus
Ay JR no se quien es mas depravado si usted o el enemigo ese. Mamalones, tortilleros, padrealbertos!!!
ResponderEliminarUn amante cubano es más bulla que otra cosa, y además tienes que tragártelo completico, con sus complejos de Adonis, con ese machismo que no es otra cosa que la falta de una buena cama bien dada.
ResponderEliminar¡A palo con el falo!
Grettel querida, ayer blogger estaba truncado toda la tarde, por eso no entré antes, ni pude subir comentarios hasta tarde. Hallarás otros comentarios en face book. Buen ejercicio de desmitificación del macho-espécimen-retrógrado de nuestra (in)cultura isleña. Saludable, terapéutico.
ResponderEliminarLas cubanas no eh. La cubana es la perla del edén, como dice Barbarito Diez ☺
rosie, atrapaste la esencia del cuento.
ResponderEliminarno tengo cuenta en facebook, a ver si entro de espía con el código de mi marido.
besitos
Soy el terror de las mujeres casadas. Por mi Chashitsu|ochaya (salón de té) desfilan día tras día les hommes marriés cansados de que sus esposas o amantes sean aspiradoras: de dinero, joyas, noches en restaurantes, viajes, spas, estilistas, haute couture. Tras tragarse todo esto se burlan de sus déficits fálicos con sus amigas y, en casos que conozco, se escurren con peloteros, jóvenes bien dotados y los siempre puntuales “personal trainers”. En mi experiencia con ero-analizandos (como terapeuta erótico) ¿qué tal los cubanos? Valga una diferencia. Si bien los balseros quedan muy bien descritos por el escrito que encabeza esta discusión, muchos Cuban-Americans se han convertido en gigantes de las artes amatorias. El viernes en un motel, un Cuban-American me sorprendió con sus magistrales tácticas que tal como literatura musical llevaban un tempo propio: adagio, allegro, allegro con fuoco, presto, prestissimo, andante grazioso y vivacissimo para el clímax musical. Los venezolanos y los colombianos, wagnerianos, me han hecho vivir momentos idílicos como Sigfrido. Ahora, los cubanos, los cubanos … Con los cubanos presqu’arrivés, c’est une autre histoire. Este es el territorio del psicodrama, de los alaridos, de “¡papi, que rico!” “ay si … ay no” “esto es pa’ ti, pa’ ti na’ ma’” “¿quién es el más rico?” El rito de “quita y pon” de posesión, de superlativos medidos por esa categoría indefinida que es la “ricura”, los ritos fálicos (medida y grosor), por cierto soy hombre, el “benchmarking”, los cuentos de la escuela al campo (donde al parecer un gran porcentaje de los presqu’arrivés probaron el unicornio en la espesura). Lo que este estudio que como terapeuta y geisha hombre he podido concluir es que en líneas generales, los cubanos recién llegados tienen una actitud más refrescante ante la bisexualidad, gustan de la intimidad y el jugueteo con otros hombres y acrecientan su libido con todo un ritual dramático intenso, entretenido, a veces culturalmente uniforme y predecible pero que no deja de resultar entretenido y que bien acompañado fálicamente, es altamente estimulante.
ResponderEliminarEl Geisha Explorador
y, por favor, cuál es el nombre de cuenta de tmb en facebook? no sabía que estaban por allá... lo pueden anunciar acá? gracias
ResponderEliminarsonora, estoy super de acuerdo contigo, creo k grettel pudo haber sido mas "riske"...la amiga pudo desarrollar finalmente su deleite por la ostion con barbas o la alfombra de pelos...grettel, no todos los cubanos son iguales ni los de otros equipos son mejores o peores. hay de todo en la viña del señor.
ResponderEliminarlong time no C.
I am glad that I am not a cuban, because every time I get an erection, I almost faint from the rush of blood to my penis.
ResponderEliminarTripod Jones
Son maricones todos, segun dice Rosie Inguanzo.
ResponderEliminarOh no! I'm a lesbian trapped in a man's body.
ResponderEliminarDon Hetero
Yo quiero que me cuide El Geisha Explorador. Ese tipo es el maestro. Se imaginan cuantas tecnicas secretas tendra a su haber? YO QUISIERA QUE NOS RELATE MAS DE SUS EXPERIENCIAS. ?Como comenzo sus aventuras? ?Fue casado alguna vez? Que escriba mas.
ResponderEliminarMuy interesantes las hitorias del Gay-sha este.
ResponderEliminarCon Grettel, ya lo que tengo es obsesion. Que mujer mas bella, que bien escribe, que lejos de mi...