Laura Luna
Me pregunto si el acto de arrepentirnos (sin religión que nos amortigüe el golpe) alivia en algún grado el dolor por los errores cometidos. De cualquier manera no se puede volver atrás. No somos quienes fuimos ni siquiera celularmente. De alguna forma y ojalá para bien, somos mejores que ayer, peores que mañana. Siempre en dicotomía y bifurcaciones se nos presenta el destino, como juego en el que se nos va la vida. He sido Ulises y Penélope; ese escondido pliegue entre la aventura y la espera, separadas-juntas. Latiendo entre la angustia premeditada de la tentación y la suave renuncia de la esperanza. He sido esto y aquello. He mentido por piedad y por cobarde. He sido cruel, por cobarde y egoísta (no hay otra manera de serlo), pero también me he olvidado de mí para darme a otros y he sido escalón de ajenos. Me siento orgullosa y apenada; tal vez menos melancólica y taciturna. Orgullosa de mi estoicismo y mi dignidad; apenada por mis cobardías. Quisiera volver atrás y rehacer lo hecho, limpiar el dolor innecesario, pero esta consciencia que ahora me embarga ha crecido de todo aquello. He sabido siempre que no vine al mundo a vivir en la zona neutral de la existencia; pero de eso a tomar responsabilidad por todos mis pecadillos a pecho descubierto. Después de todo es un alivio el sentirme culpable.
11 comentarios:
Que bien dicho Laura. De pequena siempre me sentia muy culpable. Vengo de una familia muy catolica. Ya no... me hace mucho bien dejar la culpa en el umbral de la puerta.
Tu camino lo creaste, no es escogido por otro ni nadie menos uno mismo. Ese camino te pertenece, es egoistamente tuyo. Siguelo con valor, sin temor, aunque sea dificil, hasta su final.
"Mea Culpa", si lo es, Dios nos da la libertad de escoger, aunque muchas cosas que nos cae no podemos delegar y tenemos que aceptar. El dicho "el hombre (o mujer) propone y Dios dispone", es verdad, pero escogemos el camino que tomamos. Al pasar los años, si tenemos ese regalo de la edad y sabiduria, analizamos nuestro pasado, para intentar de comprender como nos afecta el presente y lo que nos espera. El pasado no se cambia, lo que si cambia es nuestra memoria o manera de recordarnos del ayer. El presente lo vivimos, es fluido, y muchos solamente reaccionamos hacia las metas habituales. Hacia el futuro, bueno, quien lo sabe? Dios, unos caracoles tirados al piso, una bola de cristal? Sera nuestra imaginacion ese concepto del tiempo, el pasado, presente y futuro?
Es lo que es, existimos como nos identificamos. Al fin de esta existencia la gran pregunta se contestara. Gustanos o no, es lo que es, fue lo que pensamos que fue, y vendra lo que sera.
Es que la culpa sólo me sirve para reconocerme y perdonarme. A veces nos exigimos demasiado. Ser más flexibles con nosotras mismas, que siempre nos damos con furia...en fin, el mar. Pena de educación judeo cristiana, pur(t)o lastre.
Me ha encantao leer esto.
Nunca ha sido mi intencion hacer mal a nadie. Si lo hice, me arrepiento. Arrepentirme me hace dormir tranquila.
me encanta esta frase tuya:
Latiendo entre la angustia premeditada de la tentación y la suave renuncia de la esperanza.
gracias laura
CULPA MEA
Querida Laura,Me sorprende como se sienten tantos culpables. Yo creo que ese sentimiento existio en mi pasado, pero ya ni lo recuerdo. A los 83 anyos hay cosas que se me olvidan, que felicidad!, no recuerdo haber hecho nada que me haga sentir culpable. De todos modos he descubierto que el presente es lo unico que existe y es donde vivo. Tengo la suerte
de no estar sola sino acompanya de Bill, el hombre mas extraordinario de la vida, que aun no ha llegado a los 80, y tiene la salud como si tuviera 35. El me cuida y me hace feliz cada dia. Si el se muriera antes que yo,(Dicen que por lo comun las mujeres viven seis anyos mas que los hombres), mandaria a hacer una caja un poco grande, donde yo pudiera meterme con el. Salud para todos, La Chuna
Arrrfredo tira algo de Miriam Makeba
Ta bueno el final de Laura.
La receta de tumiami de puerco hay que probarla a ver.
sabio post Laura
GRACIAS POR LA RECETA.
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