Isis Wirth en Books and Books: "Alicia es la Fidel en puntas"

Rosie Inguanzo

Ayer en Books&Books Isis Wirth presentó su libro Después de Giselle (Aduana Vieja: 2007), con prólogo de Zoé Valdéz, para un público entusiasta que la acompañó por casi tres horas de charla, video y performance. Lo más ameno fue escuchar a esta mujer inteligente, aguda y delgada, postura aérea y temblorosa, su piel blanquísima, sus ojazos, sus manos expresivas; toda ella denota una danza singular de la personalidad: “La función de la danza es el no-lenguaje, y la crítica del ballet es una traducción de sus códigos”. Dijo que su labor como crítica de ballet-“meollo estético irresoluto”- trata de articular lo inefable del gesto individual del bailarín, evitando la referencia técnica constante: Nos aseguró que la moción individual, al margen de la técnica, ha de articularse en la crítica de ballet para aproximarnos al registro de un arte efímero. Surgió inevitablemente el tema de la relación entre ballet y política/autoridad, que Isis dilucida en el ensayo, “Una metáfora del totalitarismo” entre otros: “Las democracias no se llevan con el ballet clásico. Y está en nuestras manos cambiar eso…separar el ballet de la política […] El ballet le gusta a la política, es metáfora del totalitarismo. Luis XIV, bailarín, padre del ballet, fundó todo pero a su imagen y semejanza, para hacerse del poder absoluto”. Abordó entonces la estructura monárquica ligada a la fundación misma del ballet: “Una compañía es una corte marcial” […] Alicia es la Fidel en puntas […] ella es tan ballet que es Odette y Odile, cisne blanco (de la escena) y cisne negro (en su comportamiento político social)”.