lunes, 18 de agosto de 2008
Vicky Cristina Barcelona: Promiscuidad sana bajo el óleo de una ciudad
Amílcar Barca
¿Puede el ser humano querer a “dos mujeres a la vez (Vicky y Cristina) y no estar loco”, o que dos mujeres a la vez se quieran y querer a un mismo hombre (Juan Antonio)? ¿Y si además el thresome tiene una vertiente latina colérica (María Elena) capaz de unir y destruir una relación, mientras los acordes de una guitarra flamenca (Paco de Lucía) se oyen como fondo? ¿Y si el padre del susodicho es además poeta y probador de “novias” del hijo? ¿Y qué pasa si hay otras novias -sin-habla como la arquitectura de Gaudí, el vino tinto del Priorat, el restaurante Casa Leopoldo, La Ramblas, la pintura abstracta inspirada en Tàpies, el mar, la masía, un aeroplano destartalado o un laboratorio fotográfico con la luz roja de peligro que avisa que una relación de tres acaba de nacer? Preguntas que tienen respuesta en una comedia floja -repito- floja, pero al fin y al cabo muy divertida para un público americano que gusta de los tópicos de España y los muestra bajo la mano inteligente del autor de Manhattan. Cosas a destacar: la asombrosa facilidad de Allen para inventarse cada año una historia y contarla, el desarrollo de un mundo mediterráneo (pasional, hedonista y libertino) muy cerca del lugar común, frente al mundo americano (conservador, experimental, y pragmático) más cerca de lo real; la gran interpretación de Penélope Cruz (María Elena) que sólo aparece a la mitad de la película y, en palabras burdas, “se la come” y salva la caída del guión; la dignidad de Bardem (Juan Antonio) que sigue manteniendo el listón muy alto, y el descenso -yo diría a propósito, por el papel que le toca asumir en el film- de Scarlett Johansson (Cristina). Quiero afirmar algo un poco arriesgado: el maestro Allen “mira” -léanlo cada uno a su manera- en más de una escena a Almodóvar. Y para finalizar una última pregunta: ¿Será Penélope la próxima musa de Woody? Espero que los espejuelos tan característicos de su rostro le permitan distinguir el árbol del bosque.
La vi la semana pasada... creo que estoy de acuerdo contigo Amilcar. BArdem parece honesto, Maria Elana una loca, y Cristina totalmente perdida. Claro que asi fuimos cuando teniamos su edad (jiji)
ResponderEliminarCuando empecé a leer pensé que se trataba de alguna memoria personal y me dije coño esto parece un enredo de Almodóvar. Así que parece que el maestro Allen "miró" con lupa al manchego.
ResponderEliminarHace unos días Penélope se quejaba de que Allen apenas le prestó atención al rodaje de una escena con beso lésbico que a ella al parecer le fue difícil. Dice que él se pasó todo el tiempo mirándose una nueva manchita que le había salido en la mano, hasta que interrumpió el rodaje para ver a un médico. Cosas de ocambo que ve la pelona en el horizonte, más preocupado ya por Tanatos que por Eros.
Me extrana que no menciones a Vicky, que es la protagonista y ademas de muy buen actuacion que tiene. Voy a buscar el nombre y se los digo. ese fue el personaje que mas me gusto, el de Vicky. Pero como no es famosa.
ResponderEliminarMi hija me dijo que la pelicula es una comedia sosa.
ResponderEliminarHace ya mucho tiempo que Woody no hace algo que sirva....propio de la chochera.
ResponderEliminarDe acuerdo anonónima de la 1.43 se llama Rebecca Hall. Y sí... estoy de acuerdo contigo que lo hace bien, aunque el papel es el clásico de la "americanita" que quiere probar algo diferente pero su moral no le permite dar un paso hacia adelante.
ResponderEliminarGracias Lopez Ramos por sumarte a una opinión que tenía un poco de miedo de mostrar...¿Como un maestro iba a imitar a un recién llegado a Hollywood por muy consagrado que esté Almodovar?
Amílcar
Amílcar: Confiesa que eres un libertino.
ResponderEliminarNo AT.Yo no soy libertino sino "mediterráneo". Este es un concepto que aquí no se conoce mucho. Pero cuandó un francés, un griego, un italiano o incluso alguien de la costa del Magreb te habla del Mare Nostrum como un lugar común, es que hay una cultura a compartir. Y ya se sabe...esto de compartir sí está conmigo.
ResponderEliminarAmílcar
Fifo se tiro un peo!
ResponderEliminarAlfredo, no tengo tu email, por favor mandamelo a blogdemedea@gmail.com, un abrazo.
ResponderEliminarLORD JIM!
ResponderEliminarPiet
Great film, which shows us how fate (broken leg), cowardice, humility, and finally honor, leads us toward a re-birth in a higher level. The days of the VOC, Batavia, and independence.
ResponderEliminarPiet
The central occurrence of Lord Jim appears to be based on true events. Although Conrad never confirmed this, there seems to be too much similarity for mere coincidence. On 17 July 1880, S.S. Jeddah sailed from Singapore bound for Penang and Jeddah, with 778 men, 147 women and 67 children on board. The passengers were Moslems from the Malay states, traveling to Mecca for the hajj (holy pilgrimage).
ResponderEliminarJeddah sailed under the British flag and was crewed largely by British officers. It was owned by the Singapore Steamship Company, whose managing director, Seyyid Muhammad al-Sagoff, came from a wealthy Arab family well established in Singapore. Seyyid Omar al-Sagoff, Muhammad’s son, was on board at the time of the incident. After terrible weather conditions in the first week of passage, the ship's boilers ‘started adrift from their seatings’ and Jeddah began taking in water. The hull sprang a large leak, the water rose rapidly, and the captain and officers abandoned the heavily listing ship, taking Seyyid Omar with them. They were picked up by another vessel and taken to Aden where they told a story of violent passengers and a foundering ship. The pilgrims were left to their fate, an apparently certain death.
However, to much astonishment, on 8 August a French steamship towed Jeddah into Aden - the pilgrims had survived. They had been abandoned by those meant to protect them and an official inquiry followed into this great scandal. It is strongly suspected that this dishonourable tale inspired Conrad, who had landed in Singapore in 1883, and he wove the main themes of Lord Jim around it, using the name S.S. Patna for his fictional pilgrim ship.
Piet