Carmen Diaz
Anoche vi la película Marat-Sade, de Peter Weiss. Cuando la vi por primera vez, no pude comprender el lenguaje cáustico ni la irreverencia contra las “revoluciones”; mucho menos la ridiculización destemplada del poder populista. Tenía quince años. Anoche se me ocurrió que algún sesudo de este blog (medio dramaturgo) pudiera construir una versión, digamos que un homenaje caribeño al creador de esta obra/film. No tendría que seguir el libreto original. Esta versión se desarrollaría en Mazorra y los actores serían dementes que han perdido la razón en nuestra historia reciente. Un loco podría estar obsesionado con llenar bolsitas de polietileno para sembrar café Caturra; otra sería una ex-ingeniera ambientalista que repitiera hasta el cansancio: “No corten árboles, van a joder el microclima”; otro sería alguien que piensa que está siendo comido por un tiburón en alta mar; otro uno que perdió las dos piernas porque los soldados que trataba de ayudar en Angola le pasaron por arriba huyendo; un poeta disidente que hablara en verso; un exilado que prepara guerrillas contra Cuba en los Everglades. También alguien que está cortando caña figurativamente para conseguir el refrigerador soviético. Charlotte Corday sería la jinetera que asesinaría a Marat. Marat podría ser Fidel, sentado en una silla de ruedas, empeñado en dar recetas de cocina de alta eficiencia energética. Los enfermeros del sanatorio serían miembros del CDR y las monjitas, entusiastas federadas con la imagen de la difunta Vilma Espín en sus cofias. Todos altamente entrenados en dar electroshocks. Podríamos tener alguien que siempre cree empujar una balsa hacia la orilla. Sade podría tener un papel menos sádico, más burlón quizás, aun más nihilista. El coro podría estar integrado por una bailarina de Tropicana obsesionada con viajar a México, un cirujano encaprichado en criar un puerco en el balcón, un ingeniero químico que cree vender merenguitos en El Prado, una soprano lírica que perdió su status desde el viaje del Papa: “No tengan miedo”, entona muerta de pavor. Los cuatro tendrían que cantar muy bien. Naturalmente, hay que ampliar la descripción de los actores y la pieza en si, hay que armarla. ¿Quién se ofrece?
Anoche vi la película Marat-Sade, de Peter Weiss. Cuando la vi por primera vez, no pude comprender el lenguaje cáustico ni la irreverencia contra las “revoluciones”; mucho menos la ridiculización destemplada del poder populista. Tenía quince años. Anoche se me ocurrió que algún sesudo de este blog (medio dramaturgo) pudiera construir una versión, digamos que un homenaje caribeño al creador de esta obra/film. No tendría que seguir el libreto original. Esta versión se desarrollaría en Mazorra y los actores serían dementes que han perdido la razón en nuestra historia reciente. Un loco podría estar obsesionado con llenar bolsitas de polietileno para sembrar café Caturra; otra sería una ex-ingeniera ambientalista que repitiera hasta el cansancio: “No corten árboles, van a joder el microclima”; otro sería alguien que piensa que está siendo comido por un tiburón en alta mar; otro uno que perdió las dos piernas porque los soldados que trataba de ayudar en Angola le pasaron por arriba huyendo; un poeta disidente que hablara en verso; un exilado que prepara guerrillas contra Cuba en los Everglades. También alguien que está cortando caña figurativamente para conseguir el refrigerador soviético. Charlotte Corday sería la jinetera que asesinaría a Marat. Marat podría ser Fidel, sentado en una silla de ruedas, empeñado en dar recetas de cocina de alta eficiencia energética. Los enfermeros del sanatorio serían miembros del CDR y las monjitas, entusiastas federadas con la imagen de la difunta Vilma Espín en sus cofias. Todos altamente entrenados en dar electroshocks. Podríamos tener alguien que siempre cree empujar una balsa hacia la orilla. Sade podría tener un papel menos sádico, más burlón quizás, aun más nihilista. El coro podría estar integrado por una bailarina de Tropicana obsesionada con viajar a México, un cirujano encaprichado en criar un puerco en el balcón, un ingeniero químico que cree vender merenguitos en El Prado, una soprano lírica que perdió su status desde el viaje del Papa: “No tengan miedo”, entona muerta de pavor. Los cuatro tendrían que cantar muy bien. Naturalmente, hay que ampliar la descripción de los actores y la pieza en si, hay que armarla. ¿Quién se ofrece?
21 comentarios:
no creo que hubiera mejor candidato que tu para desarrollar la obra. consiguete un elenco de actores (quizas en prometeo,") un director joven y una sala, donde quiera y asi comienzas. esto requiere urgencia de tu parte, ya que es solamente tuya y de nadie mas. no pierdas el fervor y manos a la obra.
"senores que pachanga"
productora ejecutiva: carmen diaz
director: loveo dirigiendo
protagonistas principales:
catalina quiereactuar
jose nuncactue
gina bollodrigida
Yo siempre he querido ser actriz... please Carmencita, dame una oportunidad! Puedo hacer el papel de gay de lo mas bien!
Carmen:
No creas que en mi pais es diferente con un presidente de la tercera edad con su mujer con infulas de reina de la nacion, latifundistas de isquierda y un complejo de inferioridad con Europa y superioridad con los vecinos....sin contar militares hegemonistas que quieren una Argentina que de al Atlantico! Jijiji
Muy buen post, Carmen.
Muy bien, Carmen, eso es. Farsa, absurdo, surrealismo, onirismo, grotesco...todos los ingredientes de este registro dramático de medio siglo cubano o quizás mucho más. Cada uno de nosotros o de nuestros muertos contiene a un protagonista dentro.
Casi cincuenta an~os de obra del absurdo con guion cariben~o del Fifo. Tremendo dramaturgo!
Carmen. Excelente post.
Un demi-tauma-trauma-dramaturgo y una mesa de disecciones reunidos sobre una islita que quiso ser continente.
Vaya...ahora nos desayunamos de que la politica es el genero del absurdo?... Carmen no existe diferencia entre el absurdo socialista, el totalitario o el capitalista, o el monarquico.
adal, provocador. Pero tal vez para Carmen la propuesta es el rodaje, la acción. Ella regala de su imaginación por la tanta que tiene en su casa. Historias como estas son mejor diseño para las camisas de los trabajadores del aeropuerto.
nilo...tan lindas que estan las camisas...mientras tanto ve esto:
http://youtube.com/watch?v=gzY_hRujuz0
carmen y todos los demas veanlo:
http://youtube.com/watch?v=gzY_hRujuz0
Alguien me robo mi gel! devuelvanmelo pleeeeeeese! mi pomito de gel (sob,sob)
jr,at...tienen que de todas maneras ver esto:
http://youtube.com/watch?v=gzY_hRujuz0
at...se merece un post! es la obra videoart mas comica que he visto hasta ahora!
Asere, yo puedo hacer el papel de Mamito. Yo soy niche, por si no lo sabian...todos los niches de este blog, porfavol levante las manos y digan presente. La nichada esta en la calle ya! Quitale el sillon y botala, a esa blanca, quitala.
transpolarizacion cubiche.........se dice asi????? CARMEN tiene usted una imaginacion como la de BUNUEL............piensa boniatillo que asi surrealista es la realidad alli...............no solo ahora, siempre lo fue.
Es cierto lo que algunos han señalado de que el absurdo no es patrimonio del socialismo... De hecho, el teatro del absurdo se originó en países capitalistas. Quizás la diferencia es que en medio del socialismo tropical algunas de esas imágenes inverosímiles terminan pareciéndose demasiado a la realidad.
Me encantaría asistir al estreno de esa obra, promete
Mi pomo de gel! Quien tiene mi pomito de gel? devuelvanme mi pomito de gel, por favor!
Quien fue el que dijo que la vida es un absurdo?
pues me parece que ya esta casi hecha ... unos cuantos dialogos y ya... dale Carmen que tu puedes!!! y no te olvides de ponder deprops "dos gardenias"...
blogo amigos visiten al ICRA blog.
http://icrariza.blogspot.com/
Instituto Cultural René Ariza.
4 notas.
Cursos Teatroenmiami.
Dos capitulos nuevos de Lanzar la flecha.
TuMiamiBlog propuesta Carmen Diaz.
HavanaFama de Tournet.
El pez de la torre nada en el asfalto...
Publicar un comentario