Ahmed Gómez
Armando Regalado era uno de esos cubanos que todo el tiempo acompañan su vida con el epíteto “es bueno, muy bueno, pero no hay como el de Cuba”. Esa tarde quedó en verse con un viejo amigo que le había prometido un refinanciamiento y se encontraron en una de esas fondas obreras que abundan en las zonas de los warehouses, donde él tenia su pequeño negocio de gabinetes de cocina. Una vez devorado un suculento plato de frijoles negros con arroz blanco y ropa vieja (y para matar la modorra que provoca semejante carga de calorías al mediodía), pidieron café. No tardó en conversarse lo mismo, que comenzó con el café y terminó con la abundancia de las pencas en las palmas reales. De pronto, una señora que escuchaba de espaldas desde la mesa de al lado, giró la cabeza y dijo: “Chico, lo que pasa es que tú todavía no te has ido de Cuba”. Armando, que para eso tenía ya la respuesta filosófica prefabricada, se la espetó con una sonrisa autosuficiente. Sin inmutarse, la mujer respondió: “Tú no entiendes, no te has ido de Cuba, y posiblemente nunca te vayas, estás soñando y es mejor que despiertes. Abre tus ojos”. De momento, Regalado no reconoció las líneas del piso, levantó la cabeza aturdido y para su asombro sólo vio letras rojas, inmensas. La mesa convertida en una loma de papel gaceta, sobre la que él yacía tendido bocabajo. Se levantó espantado. Todo lo que ahora tenía a su alrededor lo remontaba 15 años atrás, cuando trabajaba en Cuba, en el DOR. Salió corriendo por un pasillo donde se tropezó con la jefa del sindicato. “¡Eh! ¿Y esa cara, viste un muerto?” Trató infructuosamente de despertar “de vuelta” a su vida anterior (también recurrió al café). La certeza de que ahora era efectivamente “más feliz” lo aterrorizó de tal manera que esa misma tarde se lanzó delante del tren Santiago–Habana. Fue el tercero en hacerlo ese año en Cacocum.
Armando Regalado era uno de esos cubanos que todo el tiempo acompañan su vida con el epíteto “es bueno, muy bueno, pero no hay como el de Cuba”. Esa tarde quedó en verse con un viejo amigo que le había prometido un refinanciamiento y se encontraron en una de esas fondas obreras que abundan en las zonas de los warehouses, donde él tenia su pequeño negocio de gabinetes de cocina. Una vez devorado un suculento plato de frijoles negros con arroz blanco y ropa vieja (y para matar la modorra que provoca semejante carga de calorías al mediodía), pidieron café. No tardó en conversarse lo mismo, que comenzó con el café y terminó con la abundancia de las pencas en las palmas reales. De pronto, una señora que escuchaba de espaldas desde la mesa de al lado, giró la cabeza y dijo: “Chico, lo que pasa es que tú todavía no te has ido de Cuba”. Armando, que para eso tenía ya la respuesta filosófica prefabricada, se la espetó con una sonrisa autosuficiente. Sin inmutarse, la mujer respondió: “Tú no entiendes, no te has ido de Cuba, y posiblemente nunca te vayas, estás soñando y es mejor que despiertes. Abre tus ojos”. De momento, Regalado no reconoció las líneas del piso, levantó la cabeza aturdido y para su asombro sólo vio letras rojas, inmensas. La mesa convertida en una loma de papel gaceta, sobre la que él yacía tendido bocabajo. Se levantó espantado. Todo lo que ahora tenía a su alrededor lo remontaba 15 años atrás, cuando trabajaba en Cuba, en el DOR. Salió corriendo por un pasillo donde se tropezó con la jefa del sindicato. “¡Eh! ¿Y esa cara, viste un muerto?” Trató infructuosamente de despertar “de vuelta” a su vida anterior (también recurrió al café). La certeza de que ahora era efectivamente “más feliz” lo aterrorizó de tal manera que esa misma tarde se lanzó delante del tren Santiago–Habana. Fue el tercero en hacerlo ese año en Cacocum.
Jjijiji. Eso le paso por sonnar tanto...,en mi pais dicen que el que mucho suenna se pierde en el suenno.
ResponderEliminarAhmed: Tendra ese relato algo que ver con Jalouin?
ResponderEliminarBuen día, comunidad. Cada vez que arde un bosque por ahí, la perturbación se me manifiesta en el desenchufe de los aparatos, entre ellos y en relación (magnética) conmigo. Magníficos los últimos cuatro posts y algunos de los correspondientes comentarios, que comentaré por lo menos en mi cabeza. Por aquí seguimos.
ResponderEliminarArmando y Desarmando, sueño y realidad... Bien, Ahmed, dices cosas.
ResponderEliminarSerá que "Estamos próximos a despertar cuando soñamos que soñamos"
Por otra parte, Desilusión y Mimetismo fueron al río, Desilusión se ahogó: ¿Quién quedó?
Ese sueño, ese despertar, no debe quererse ni Regalado.
¡Afile ese lápiz y siga escribiendo, pintor!
Alfredo, antes de que aperezca Machetico... Ay un "es" de mas:
ResponderEliminar"estas es sonando..."
Si el sueño fuera (como dicen) una
ResponderEliminartregua, un puro reposo de la mente,
¿por qué, si te despiertan bruscamente,
sientes que te han robado una fortuna?
(El Suenio de Borges)
Gracias Inkie. Arreglado.
ResponderEliminarMisteriosa historia. Muy apta para la bobería infantiloide del Halloween. Noto una pérdida de texto o de coherencia (concordancia, dicen) en "...estás es soñando...", debe ser "LO QUE estás es...". Amén, Ahmed, de que ese pueblo de tu tierra es Cacocum, termina en una M. Debe ser el único nombre de población en Cuba que termina en M. Dice la Wikipedia que "Cacocum is a municipality and town in the Holguín Province of Cuba", con 42 000 almas en 2004. Os saludo a todos con el cariño de always. He regresado.
ResponderEliminarQue casualidad Mache que entraste. Ahmed me lo mando como "Cacocum", pero yo he leido Cacocu'n, y asi esta en algunos "sitios" de respeto. Como sabes, MAche, no soy oriental.
ResponderEliminarEn realidad acabo de ver que puede decir de las dos maneras.
ResponderEliminarOye Machetico deja la ortografia, cosas nimias, lo importante es el contenido....las ideas. Supera eso y te sentiras mejor.
ResponderEliminarBuen relato oriental de Ahmed.
El nombre de esta población holguinera es "San Pedro de Cacocum". Muchos escriben Cacocún porque la grafía con la "m" final resulta extraña en nuestro idioma. Pero el nombre correcto lleva la "m" final.
ResponderEliminarPues con taman~a autoridad no discutire'. A la 1:41pm cambio la 'n' por 'm'.
ResponderEliminarCacacun o Cacocum... que mas da pa un pueblecito tan chiquito.
ResponderEliminarCon el perdón de los presentes, estoy un poquito confundido: ¿Cuál es la moraleja de la historia?
ResponderEliminarYo de vez en cuando me despierto, en plena madrugada, con los sudores de la autodeportación. Es espantoso. Es una pugna por rescatarme a mí mismo del retorno involuntario que va transitando por los medios más diversos e inconcebibles. Desde la clásica balsa rodeada de tiburones hasta zeppelines incendiados. Vaya que las pesadillas mías son trademark.
ResponderEliminarla moraleja es que Ahmed esta pintando paredes en Cacocum y nosotros sonamos que es aqui en la calle 8
ResponderEliminarpues boniatillo duerme como un bendito............gracias a DIOS y a todos los angeles protectores.
ResponderEliminarYo tengo una pesadilla recurrente: Estoy de vuelta en la escuela y llego tarde para el examen final!
ResponderEliminarjajaja
Otro pueblecito chiquitico: Biran.
ResponderEliminar;)
¿sueño o geografías? la memoria te traiciona con el deseo de volver, el miedo a lo nuevo… “no hay nada como lo de allá” explica el fracaso de no estar allí
ResponderEliminara.t, el nombre del documental es Open Mongo Napoleón
ResponderEliminarEl único cuento de horror es este cuento de horror.
ResponderEliminaryo quisiera poder fumar de la que ustedes fuman. estan seguros que no son usuarios de "la patinadora," o quizas blanca rosa gil y solamente usan el vano alchohol y la verdolaga? por ahi siento rastros de humedad.
ResponderEliminarmuy bueno tu escrito ahmed y muy apropiado para la fecha de jalowin.
nilo preparate asereko, te estoy preparando tremenda turba pa'l viernes (tomates en mano) asi que eso mejor sirva para algo! suerte mi socio. espero conocerte en persona esa noche.
animato.com - creativos del blog, chequen las oportunidades que ofrece este sitio
ResponderEliminarprobando
ResponderEliminarEnemigo.......
ResponderEliminarEnemigo.......
Reportate.....
Mordida , tu si eres de la linea dura, no sabes cuanto te admira mi suegra.
ResponderEliminarMache: "Muy apta para la bobería infantiloide del Halloween".de eso se trata nooo?yo creo que sentiste identificado con Armando R., por aquello de las graficas politicas del D.O.R.
Ramon , espero tu estreno con ansiedad de quinceanera antes de una pelicula de Brat Pitt...
Estaba fajao con la maquina...
ResponderEliminarDaina, Ca-Cocoon , no te trae nostalgias extraterrestres?
ResponderEliminarEnemigorumor mío:
ResponderEliminarMe has hecho reír con tu ocurrencia. Me ha venido bien un poco de humor después de haberme pasado todo el día, muy seriecita, delante de mi computadora.