Por Alfredo Triff
La mente alza el vuelo. Las cosas tienen un sigilo, como cuando se mira cara a cara lo otro. Mirada próxima y convulsa desde la goma de mi auto, de donde un relieve jurásico me observa con escueta frialdad. Verde artero que se aventura en la tierra de los gatos. Vigilancia extremante, de ojo a ojo. Imagino que por primera vez en mucho tiempo, alguien no disimula. ¿Qué somos? Acechamos absortos, con el universo a las espaldas. Él y yo. Luego, el nervio del análisis pausa, aunque no lo parezca. Sus ojos juegan con el latido del verbo, como quien coteje el hueco del chance. Un viso de antipatía me llega desde lo inevitable de su especie. De repente, un felino se interpone entre los dos... sigilosamente. No el reptil, que figura tan cerca del zarpazo. Pero nadie podrá verlo, pues nunca se mata lo inerte. El gato se aproxima y casi lo toca con su aliento. Gato receloso, mesurado, sagaz. Cada segundo es una eternidad, y todo se funde en el pulso de la nada. La presa se petrifica en sí misma, se convierte en caucho negro. Y admiro su estoicismo frente a la faz hambrienta de la muerte. Su ojo basáltico nada siente, nada mira. Hasta su miedo se ha muerto. Y el felino le pasa de lado y roza con su dermis peluda esas escamas remotas y callosas. Nada se inmuta, excepto ese ojo oblicuo que lo sigue, en sístole, hasta la misma esquina de su cuenca. Ojo a ojo dentro del saurio universo. Las cosas tienen ese sentido refractario... y en su perspectiva entran a galope: a las doce del día de un cielo sin nubes y un sol que raja las piedras.
18 comentarios:
Queeeee Deeeescargaa!!!!!!!!!!!!! Pero el verdecito ese de ojitos pa'qui y pa'lla se la merece.
Malanguita en el arbol
Oigan, me fui a hacer una diligencia y volvi y recien ahora puedo poner mi comentario. Lo deje andando muy lento...Bueno el caso es que parece que el sistema se pone muy lento a veces. Triff que clase de descarga tan interesante. Me haces reparar en cosas aparentemente sin importancia y te agradezco que te tomes el trabajo. ya no se que te iba a decir pero tengo que irme. Mas tarde vuelvo. AlexB
Triff, he tenido que esperar bastante para situar mi comentario. Me gusta mucho esta onda de tumiami de resenar estas piezas literarias pequenas. El formato es ameno y sustanciose, pero no es tedioso. Tu y el equipo de escritores que te acompanan hacen una tremenada labor. Casi nunca me los pierdo, desde aqui de la m,adre padtria les mando muchos saludos.
"Chelo" desde Saint LImona, Barcelona
Oye, Triff, eso es lo que aqui en Jaialia le decimos mirada de lagarto atropellao...
El bloguero de Jaialia
Y quien es el que aprende la leccion, el gato, el lagarto o el testigo? Entre parentesis, si de mi gata de trata, termina haciendose amiga del lagarto.
La Cafeina
Este era un poema de mi niñez, para esos que crean que no hay literatura con lagartos:
"El lagarto está llorando.
La lagarta está llorando.
El lagarto y la lagarta
con delantalitos blancos.
Han perdido sin querer
su anillo de desposados.
¡Ay, su anillito de plomo,
ay, su anillito plomado!
Un cielo grande y sin gente
monta en su globo a los pájaros.
El sol, capitán redondo,
lleva un chaleco de raso.
¡Miradlos qué viejos son!
¡Qué viejos son los lagartos!
¡Ay cómo lloran y lloran,
¡ay!, cómo están llorando".
Un ignorante de pacotilla
A eso le llamo yo talento,
Armar toda la verborrea con un gato, un lagarto y un cacharro. :) Lo que es el arte caballeros! Si los pobres bichos no se hubiesen empatado con Triff, fuesen ahora pure de polvo en el asfalto. Ahora probablemente lo son, pero al menos dejaron una huella en nuestra consciencia: Fueron los protagonistas de un escrito de Triff.
Lleva esta ignorante:
El lagarto estaba triste
pues con él se hacían zapatos;
los sabios de la familia
todo se lo habían contado:
que su cuero se vendía
en los mercados más caros,
para fabricar carteras
y sobre todo calzado:
abuelos y bisabuelos
terminaron en zapatos.
El lagarto estaba triste.
El lagarto estaba harto.
El poeta saguesero
Fábula lagartera.
El lagarto caminaba
por el asfalto, cansado.
Se detuvo temeroso
por un gatico acosado.
De negro se disfrazó,
para no ser devorado.
Cuando Triff lo descubrió,
Pensó que se había salvado.
Del gatico se escapó,
pero al fin murió aplastado.
Por ejemplo: si yo fuera “él” y obviamente el otro, que se identifica, se refiriera a mi como “él”... entonces ninguno sabe quienes somos los demás. Seremos una encarnación oblicua de Dios? (el diablo seria una asociación vulgar), a quienes se les invoca al viento, al cielo, a la red, sin dar señales, direcciones; Al menos uno de esos codiciados seudónimos. Y aquí no valdría uno de esos suspicaces refranes. A no ser que se este consumando un hecho de inequidad cibernética, otro riesgo de la virtualidad.
De todas maneras, a pesar de estas sagaces identidades y de la lúdica cotidianidad que no se rinde, que observa de vez en cuando, toma aliento y despliega la maravillosa artillería, confronta. Es talento, virtuosismo, lo que se observa a trabes de la sucia polvareda que levantan los felinos, el automovilista, acorralando instintivamente la supuesta bestia inerte que observa extrañada... Eso no esta nada mal.
Alguien se ganó un post exquisito; Felicidades! Seguiremos aprendiendo.
El Megaterio Vegetariano.
Lo mato por gusto, solo un juego,otra vida pagada por su naturaleza .... Hablo del hombre no el gato.
LMP
Hacia como dos meses no entraba. Me duele el hecho mismo: el lagarto con su estoicismo y su mimetismo con su coraje de miedo, y el gato que pierde una oportunidad dada en la evolucion de su especie. La leccion se la lleva el hombre. Siempre nos estan viendo de todas partes.
El del llano
Ayer no entre en el blog y me perdi uno de los bloggeos mas ricos q ha habido aqui, con el lagarto, el gato, los poemas a los lagartos... Triff, me recordaste un poema de Lezama, El mulo en el abismo. (Paso es el paso del mulo en el abismo, etc)en que el poeta empieza a describir la pupila del mulo, lo que esta va reflejando cuando el va cayendo al abismo...Excelente poema, y excelente post. Cierto que los animalitos nos dan pie a reflexiones como estas. En fin, que siga corriendo la imaginacion!
Serdna caminó a su casa con bastante prisa. Quería terminar "Niebla" de Miguel de Unamuno. Había quedado bastante interesado en el libro y por tener que ir a trabajar dejó al final para cuando volviese a casa. Después de abrir la puerta, comer un sándwich y beber algo de jugo de naranja, tomó una ducha y se puso su camiseta y pantalón para dormir. Se sentó en la cama y comenzó a leer en antepenúltimo capítulo. Bastante grande fue la sorpresa del joven Serdna cuando don Miguel de Unamuno, en su novela, comenzaba de repente a escribir en primera persona. Extraño es eso pues, porque la novela entera había sido sobre Augusto. Así que duro el golpe fue para Serdna el encontrarse con ese cambio. De repente Unamuno cuenta que lo visitaba Augusto. El personaje! ¿Como podía ser? Desafiaba las leyes de la lógica el escribir algo de tan extrañas características, sin embargo, eso no hizo que Serdna dejara de pensar lo siguiente:
"Un detalle simplemente fabuloso. Nunca podría imaginarme que el ingenio de este señor llegara a niveles tan singularmente altos". Pero Unamuno tenía control de la "situación". Le explica a Augusto que es su creación y por lo tanto, no existe. Al poco rato la novela termina con ciertos detalles que no es necesario mencionar. Y ahí quedó Serdna, Reflexionando sobre lo leído y aprendido.
"Vaya, nunca había pensado en la relación de la existencia real o imaginaria de la creación de esa forma" pensaba Serdna. Con este tipo de ideas Serdna va al baño, lava sus dientes y su cara y se va a la cama. Entre sus muchos pensamientos, aparece rondando uno familiar. Serdna comienza a pensar en mí. En que quizás fue creado, y que yo, hago y deshago con él así como Miguel de Unamuno hacía y deshacía con Augusto.
"Sí, este sujeto me creó. Me parezco a él. Lo he visto en el Miami Dade y se donde vive. Lo vi cuando visité a mi amigo Sergio". En ese momento Serdna se levanta se viste en menos de un minuto, abre la puerta de su casa, se sube al auto, lo enciende y se dirige adonde estoy yo.
En menos de 20 minutos está golpeando la puerta de mi casa. Le abro la puerta, sin mostrar sorpresa alguna en mi rostro claro está.
-Dime que no me creaste. Que soy real. Una persona normal así como tú-dijo
-Mmm la verdad es que eres de fantasía-le contesté
-¿Pero cómo? Yo existo. O sea, Augusto era una novela, era solamente una historia escrita. Por eso es que se podía crear lo de Unamuno. Pero yo...yo soy de carne y hueso!, yo existo. Puedo tocarme, puedo hablar, sentir, ver, oír. Así como los demás pueden tocarme, escucharme, sentirme, verme y hablarme. ¿Como puede ser posible esto?
-Augusto también "existía"-dije, mientras hacía un símbolo con mis manos imitando a las comillas-pero solamente en su ser. Así como tu también existes en tu ser.
-¿A que te refieres?
-Te creé para que seas un intelectual. No me vengas con esa basura de que no entiendes
-Me creaste mal entonces
-¿Qué?
-Te digo que me creaste mal
¿Estás diciéndome que me equivoqué al entregarte características?
-Sí
-¿Puedo saber porqué?
-Olvidaste detalles muy simples. Hiciste que me impresionara con Niebla, teniendo 19 años y siendo un intelectual. ¿Como puede ser eso?
-Tal vez tengas razón. Pero no cambies el tema. El punto es que puedo hacer lo que quiera contigo.
-Espera, ¿recuerdas "Niebla"?
-Claro que la recuerdo
-¿Recuerdas que Augusto le recuerda a Unamuno que Don Quijote es mas real que el mismo Cervantes?
-Sentido figurado hombre. No me decepciones.
-Pero si yo no existo en tu mundo, tu puedes no existir en el mío, ¿cierto?
-Jajaja estás usando los argumentos de Augusto. Pero recuerda, Augusto fue creado por Unamuno y así como Unamuno estuvo en problemas con los argumentos de este, estos argumentos seguían siendo creación de el. ¿No te das cuenta? Soy un Dios en frente de ti. Te controlo y tus intentos de confundirme son inútiles, puesto que yo soy quien los crea.
-No lo creo
-¿No lo crees? ¿Que estás intentando?
-¿Que estoy intentando? No estoy intentando nada. Solo me parece muy idiota la forma en que no sabes acerca del paradigma de lo orgánico, ni del paradigma acerca de lo mental, ni aún puedes intentar siquiera tratar de tener la fuerza de embarcarte en tu viaje en busca de virtud y en la odisea de tomar en cuenta la idea de alcanzar el conocimiento inalcanzable para relegar el Socratismo a la vulgar sátira. No te das cuenta, puedes ser Dios para mí pero sigues siendo un miserable aprendiz en el mundo real. Soy esa voz interna que te recuerda tus fracasos, tus sueños, tu búsqueda inútil de cariño en otros. Ese dolor solamente lo curas aplastando los ideales de los imbéciles. Pero sigues siendo menos que un erudito. Eres muy joven, al igual que yo. Pero la diferencia entre tu y yo es que yo no tengo la prisa de alcanzar lo infinitamente inalcanzable. Yo no estoy en esa búsqueda de la meta de la auto perfección para la cual, a pesar de tu capacidad, no estás en condiciones de cumplir por tu patética falta de constancia.
-Cállate. Eso ya lo sé. No trates de confundir las cosas
En ese momento, Serdna se acordó de tí, Carmen.
-Oh ya veo. Estás tratando de que este relato no sea tan complicado. Se lo vas a mandar a esa muchacha. Carmen. Y no quieres confundirla con tu predecible chabacanería barata, ¿cierto?
-Cállate. No metas a otras personas en esto. En Niebla, Augusto nunca habló del lector, ni menos de una persona en especial. No metas a Carmen ni a nadie en esto.
-¿Qué? ¿Acaso está despertando ese galán de novelucha radial de los años cincuenta que chorreaba cursilería? ¿Te estás haciendo el héroe?
-Mmmm estás volviéndote complicado y estás metiéndote en una zona que no te corresponde. No metas el mundo abstracto que yo creé en el mundo concreto en el cual yo apenas he puesto un grano de arena para crear. ¿Sabes algo?, voy a mandarte a tu casa.
Y Serdna se dio media vuelta, entró a su automóvil, volvió a su casa, se puso su ropa para dormir y se durmió hasta el próximo aviso.
Andres, un joven de 19 anyos.
S-e-r-d-n-a= Andres, claro que cuando evocas a Unamuno surge ese "sentimiento tragico de la vida". Pero tu problema de identidades en la ficcion esta en frecuencia con Borges: su cuento Borges y yo y Pierre Menard, autor del Quijote. Uno siempre es un otro y es muchos. Cuantos no sere yo? boniatillo
Lleven esta, poetas del blogg:
"Mi perro Trabuco"
por Sanga Mandanga
Mande mi perro Trabuco
al campo a buscar jutias
y me dijo no queria
caminar por los bejucos
Yo trizte le conteste:
"te busco un campo fino y espeso"
El perro me respondio:
"No mi amo no es por eso,
es que a uste le toca la masa
y a mi solo me da el hueso."
Aporte literario del Ambia de Overtown
Buena rima mi Ambia.
"En todo hombre hay un lagarto".
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