Por Adalberto Delgado
Miami...nombre extremadamente egoísta si se estudia su fonética: Mi-a-mi. Pero esta ciudad, aunque la criticamos y castigamos con adjetivos denigrantes, no deja de tener un embrujo único que no se encuentra en ninguna otra. ¿Serán los pastelitos de guayaba que se derriten en el calor de las pasteleras? Ah, el calor fuerte y con gran carga de humedad... (el cual hace de nuestros harapos una cubeta de agua especialmente, si se tiene el aire del carro roto o se camina a coger una guagua) es parte del hechizo miamense: ¿En qué otra parte del mundo existe un Versailles, una Carreta, un Sergio's Cafetería y los famosos Latin American? Estimados bloggeros, somos partícipes de un gran neo-surrealismo con Rey Pizza, salsa Vitanova y otras barbaridades ya mencionadas en párrafos previos. ¿En qué lugar existen más cuadros “Fruticuberos” cuál movimiento vanguardista “Kisch”?Olor a grasas y fritangas, los acéres... esas municipalidades como la de City of Miami, donde un político se hace de votos cantando con pistas (¡!), y Hialeah (otrora albergue de trabajadores de circo y dematrimonios de enanos), ciudad regida por un dictador. Hay más: los Tecasta vivieron en Cuba antes de la colonia, especialmente alrededor de esa ciudad fundada por los conquistadores –Guanabacoa—donde sus habitantes fabricaban futuros y conexiones inexplicables con el más allá, nos dejaron en nuestros corazones esta ciudad, donde vivimos. Aprende a amarlo... "como Mi a mí, no hay dos!"
Ya le caere a VIzcaino por ahi
ResponderEliminarOjo pinta
Mientras no sea oleo, no hay cráneo! Ademáa que va muy bien con este...que bueno que AT se haya tomado el tiempo en fabricar este blog. Es un vacilón!
ResponderEliminarDelgado: Yo tambien vivo en Miami y comparto esa disposicion que tienes con las cosas. Me parece que puedes ver lo malo y bueno, si, es un lugar unico, pero el problema es que no caigamos en el mismo egoismo de pensar que es lo mejor del mundo. Y la cosa sigue...
ResponderEliminarMiamense arrepentido
En la cuerda de Adalberto, "Miami citizen" me parece un esfuerzo positivo en que involucra gente distinta. El show tiene un mexicano, una chilena, cubanos, americano anglo, y una espanyola --en un centro cultural Mexicano. Ese es el Miami que queremos. Esa es la exhortacion de Rosie y Adalberto de salir del guetto. Ayer mismo Pedro Portal me contaba que el viernes por la noche escucho a Lucrecia y Aimee Nuviola. Dos senyoras cantantes cubanas en dos lugares diferentes de Miami.
ResponderEliminarAT
Adalberto, eso que hablas se me parece al barrio en NY. Un olor a grasa de madre!! Cierto, la comida de nuestras culturas tiene mucha manteca. Las mujeres se ponen gordas y nosotros crecemos tremenda panza. Mira los nipones, flacos con buen pelo y super fit. Pero conyo que ricaaaaaaaaaaaa es......
ResponderEliminarEl Buti
Dictador Raul Martinez??? No digas eso Adalberto. En todo caso monarca.
ResponderEliminarEl bloggero de Jaialia
Mire, no es mala idea dedicarle un post a esa historia. Los ochenta ya pasaron y la historia sigue su rumbo. La gente se olvida de las glorias y solo quedan las memorias. Esoes lo que tenemos, y de eso hay que hablar, para que quede para otra gente. La historia de la plastica cubana esta llena de detalles que mucha gente ignoran.
ResponderEliminarQue intrepidos esos muchachos (as) de Arte Calle!
ResponderEliminarOye Arcides, si lees esto por favor tirame un call, ya que no tengo tu teléfono y tu si tienes el mío. Asi puedo pasar a buscar los cables de micrófono que me están haciendo tremenda falta!
Y para aquellos de mente rápida...un parche antes del cuero...no, no pienso comerme los cables! Ya he jamado suficiente soga!
Saludos a todos(as) y que esta vacilón no se termine nunca! Es una de las pocas cosas casi gratis que se pueden disfrutar para dicipar.
Hoy creo que comienza la feria del libro en el Wolfson Campus y hay muchas cosas que ver, además, para la información de todos, hay música gratis, desde jazz hasta fusión y rumba (para todos los gustos) en el "Spoken Word Café" de la feria. Creo que Starbucks está regalando café a los visitantes. Partanle el brazo y apoyen al intelecto y los músicos.
Caballero no me vengan con recaditos...
ResponderEliminarHola, hola. Sí, sacerdote, mañana empieza la Feria y allá va el comercial: Precisamente mañana martes presentaré una conferencia/ performance sobre teatro en Miami, en el teatrino de Prometeo, a las 7pm. Y el sábado, ah el sábado tenemos un homenaje a Neruda...con documental de Orlando Rojas (“Neruda en Miami”), realización de Jorge Álvarez, concepto de Pero Portal y servidora, música de Aymee Nuviola (las bella mulata prima de Bofil)...ná, un descarguita bohemia. Será a las 4:30pm. Ojalá puedan venir. Este evento es parte del programa del "Spoken Word Café" de la Feria (ahí mismo al lado de la fuente, en el edificio principal), pero lo hemos movido para el teatrino de Prometeo por razones técnicas...es mucho más lindo (y sigue estando al lado de la fuente).
ResponderEliminarRI
Siguiendo con la matraquilla (mantequilla) de Miami, no se porque hay gente que se empeña tanto en alabar una ciudad como esta. Me parece que a Delgado se le olvida que todos esos "olores" y "sabores" de los que habla tienen aqui tan solo una sucursal de lo que fue La Habana. Me acuerdo en el 95 vine aqui de visita y me invitaron a comer en Larios de la Playa. Yo venia de un pais con poblacion negra y con mucho uso en la cocina de la cebolla y el ajo. Pues, me fui a la dichosa invitacion a Larios y recuerdo haberme tropezado con un trozo de pollo y unos tostones que parecian de plastico. Quizas la imitaciones de la hamburguesa o la pizza de jugete que venden en Toy's R' Us, luzcan mejor aunque sepan igual. Eso fuen el 95, el otro dia fui y me gusto. Es verdad que uno se acostumbra, se achica y finalmente se aplatana. Y creo que ese es el principal aspecto psicologico de la inmigracion: Lo estomacal. Que nadie me diga a mi que los pastelitos de Versalles son mas ricos que los de la Esquina de Toyo!!.... Quien puede comparar las pizzas de la FIORE de la Vibora? Ahi mismo al lado del cine Santa Catalina? con el cucarachero de Rey's. Que ya no exista nada de eso es cierto, pero la memoria guarda hasta los olores!! Yo creo que Don Adalberto deberia viajar a la Habana y recuperar lo que perdio cuando se lo trajeron para aqui. Ah! lo bueno que tiene Miami y su comida es que por lo menos en mi caso, mi patriotismo estomacal me impide rendirme ante su poderio colesterolico y asi mantengo la salud y la forma. Una estrategia-receta: Evita la harina y la manteca y subete a una bicicleta.
ResponderEliminarEl estratega-villapol
"El estratega-villapol..."
ResponderEliminarPareces estar peleado con la jama o prefieres mantener la linea que comer lo que se te plazca. Después de todo, somos polvo y ceniza. La tumba no importa como te reciba, ya que se traga a cualquiera. Pero bueno, tu manera de pensar es respetada. Da la casualidad que yo vivía muy cerca de la panedería y el bodegón de Toyo, el cual tu ex-comandante en jefe convirtió en una pizzeria. No se si vivistes Cuba en la época de los cincuentas, pero en Santo Suarez, tambien estaba La Gran Vía, una repostería deliciosa y mucho mejor que la panadería de Toyo, donde yo recogía el pan para mi casa todos los días. Larios es un centro turístico y no un auténtico restaurant Cubano, como los que todavía existen salteadamente por Miami. Aunque yo prefiero la comida Cubana hecha en casa. Siento mucho tus malas experiencias culinarias, pero los pastelitos de Miami no tienen nada que envidiarle a los de la Cuba pre-revolución. Para serte franco, no tengo necesidad de regresar a La Habana, ya que tengo unas memorias vividas de ella y todos mis familiares cercanos estan de este lado del charco.
Además, no acostumbro a regresar de donde he sido expulsado. Me parece hipócrita En realidad no la necesito. Prefiero visitar paises totalmente desconocidos a mi y disfrutar de otras culturas. La Cubana, la conozco bien y de cerca.
Gracias por tus recomendaciones.
Adalberto
Este comentario ha sido eliminado por un administrador del blog.
ResponderEliminarEste comentario ha sido eliminado por el autor.
ResponderEliminar