Por Alfredo Triff
Buenos días Miami. ¿Conoces la medida de un buen dictador? Nunca se rinde. Aquí tienes un ejemplo. Puedo entenderlo (acaso cualquiera haría lo mismo, dadas las circunstancias). Después de diez años disfrutando lo que Slavoj Zizek llama “el elixir inusitado del despotismo” sencillamente no se puede volver atrás. ¿Y qué decir cuarenta? La contención de la dictadura es acaso este ejemplo (esos campesinos de Bolivia sientan una nueva pauta). ¿Qué trae la dictadura? Además de la molestia de verle la cara y oírle la voz al mismo zángano mucho tiempo, jode la tierra. Y nosotros, claro, terminamos destruyéndola. Nada de sentimentalismo. Visto desde un plano desapasionadamente ecológico –no digo antropológico-- la incineración del planeta causada por nosotros es una posibilidad tácita de la evolución de la naturaleza (¿no somos acaso parte de ella?) Nos cuesta trabajo admitir que el ser humano es destructivo. Pero no se preocupen, eso aún toma medio milenio. Ya para entonces no estaremos aquí. Y nuestra prole (whatever that means) ... que se las arreglen como puedan.
Destruir no es construir Triff. Eso no es mas que un slogan ideologico que se justifica en el Marxismo-Leninismo. La destruccion del planeta es algo muy triste. Y no me parece que debas tratsr el asunto con cinismo. Es peligroso.
ResponderEliminarEl sin piedad
Sin piedad, tibio... pero no. "Destruir es construir" no es un lema de Marx, sino de Bakunin (su archi-enemigo). Tienes razon sobre mi (aparente) cinismo (que yo prefiero llamar ironia) En este caso mi uso es meramente literario. Amo el planeta. Lo que no te respondes es que hay detras de la idea de preservar el planeta... si lo vieramos mas claro seria mejor. La ecologia en su vision radical separa al hombre de la naturaleza, en lugar de hacerlo participe de la misma. Ese es uno de mis puntos.
ResponderEliminarAT
Hay que entender que la destrucción es parte intrínseca de la evolución. Quizás sea esa nuestra misión en este estadio evolutivo. Quizás nuestro papel consista en lo que otrora fuera el meteoro que termino con los dinosaurios.
ResponderEliminar¿No son los fuegos forestales formas naturales de renovación? ¿No es otro tanto el huracán?
Asumir el papel evolutivo e histórico es difícil. Todavía Judas es tremendamente impugnado. Pero ¿podría Jesús, ser lo que es sin la delación y la traición que le llevó a la cruz?
En fin, puede que Triff tenga razón. Al menos cuantitativamente los seres humanos estamos resueltos a la tarea de destrucción del medio ambiente. Oye, y que bien lo hacemos, como diseñados para ello.
<< El Socio del Vedado >>
Muy bien Socio del vedado, me gusta tu punto. Pero el hecho de que hayan huracanes no nos da licencia para acabar con todo, no crees? la diferencia entre mi y el huracan es que tengo una mente pensante.
ResponderEliminarEl bloggero de Jaialia
Creo que el hombre primitivo no destruyo la tierra porque no tuvo oportunidad. Que sabian ellos de ecologia? Creo que el socio del vedado tiene un buen punto. Me parece que la ecologia es una vuelta al romanticismo de que la ciencia y la tecnica son loos causantes de las desgracias de la humanidad. Quepiensan ustedes?
ResponderEliminarBodeguero de Jaialia – Yo no invito a la destrucción, solo trato de hacer un análisis de la realidad. No sé realmente si esa es nuestra función natural, la de destruir en “post del desarrollo”.
ResponderEliminarEl ser humano entiende como progreso la separación de su esencia como ser natural. Es por ello que invité a esa reflexión, nada profunda, sobre los caprichos de la naturaleza. ¿Seremos organismos creados para la autodestrucción?. Lo que parece claro es que nos es sumamente difícil el equilibrio. Además de estar al final de la cadena alimenticia nos regocijamos con la creación de entornos humanos o humanizados: ciudades, carreteras; en detrimento de otros organismos vivos.
Yo no soy un ecologista, ni entiendo mucho de eso. Solo trato de observar a mi alrededor - y lo que veo - es un organismo multicelular voraz; llamado Humano, que destruye aquello que le es primario, como el agua o la calidad del aire en post de valores materiales de segunda mano, que sin un buen buche de agua clara y aire limpio; valdría poco todo el desarrollo tecnológico del que hacemos gala. Pero por otro lado entiendo que una parte importante de nuestro ser nos invita a esos avances, a descubrir, a incidir en la naturaleza.
<< El Socio del Vedado >>
Sorry donde puse Bodeguero es Bloggero, se me fue el dedo en el teclado.
ResponderEliminar<< El Socio del Vedado >>
Señores no se arredren, tenía que venir una mujer a recordarles que somos tan destructivos como constructivos. El hombre también ha construido maravillas insalvables, porque todo lo es...aparentemente nada se salva de la destrucción, del deterioro, de la desaparición. Estoy con Triff en eso. No nos queda más que la actitud firme y una gran ironía.
ResponderEliminarY para contribuir a las discusión: a veces no sabemos, mientras construimos, que estamos destruyendo algo por carambola. Comemos tuna aunque mueren delfines atarpados en las redes...y para calentarnos hay que quemamos leña. Nos queda informarnos y participar aunque sea con un granito de arena. (discutiendo con machitos only) Isa
Admito y admito. La discusion es fuerte para mi intelecto. Pero pongo mi grano de arena: y donde dejamos a Dios en todo esto? O podemos llamarle lo que ustedes quieran, la naturaleza, OM, lo que sea. Donde esta Dios en todo el asunto de la ecologia? Dios=Naturaleza entonces eso esta primero que nosotros. Perdon, pero soy idealissta. By the way, el blog se esta poniendo en algo...
ResponderEliminarLa constancia de lo perecedero. Es por ello que resalté que no entiendo mucho de ecología, ni ecosistemas, ni Green Party o no comerse una buena chuleta...
ResponderEliminarEl punto que me parece interesante es : ¿Destruimos por placer? ¿Existe un elemento intrínseco que nos lleva a destruir/crear?. Adentrarnos sin pautas científicas a la ironía de un meta- propósito, una suerte de catalizador a la manera de nuevo comienzo, podría darnos un sentido de designio.
Lo que trataba de exponer era la parodia de creernos creadores (y de hecho lo somos) pero a costa de aquellas cosas completamente necesarias. Quizás nuestra vocación creativa no es más que un sin número de otras destrucciones importantes.
Cuanto aprendemos de la ciencia nos muestra incontables elementos reguladores y equilibrantes que la naturaleza utiliza de manera sabia y Boom!, aparecemos los humanos rompiendo ciertas armonías y marcando nuevos esquemas.
Mi punto no es moral, no juzgo... Luego de pensar un poco no veo del todo descabellado que quizás es nuestro proyecto, en el juego equilibrado de la naturaleza, la destrucción para la siguiente creación.
Quizás estamos aquí para ello: desestabilizar, desnivelar, destruir y crear.Triff, tu eres filósofo, ilumínanos en esto.<< El Socio del Vedado >>
¡Qué viva el intercambio de opiniones! Incuestionablemente constructivo.
ResponderEliminarAdelante blogueros...
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